Bladimir Viteri, El Pintor de los Pueblos Afro-ecuatorianos

  PRESENTACIÓN   Bladimir Viteri: anécdota y mollera     Germánico Solís   Todo inicio supone olvidar los traspiés y empezar el camino hacia la arisca felicidad. Decidí quedarme parado en esta bifurcación del tiempo, permitién-dome la vida encontrarme con el pintor y escultor ibarre-   ño Bladimir Viteri Arce. Este atino de la existencia apro-bó el buen saludo, apretar las manos hasta no aguantar, sentir el abrazo fuerte de la amistad y hacer imposterga-ble el instante para hablar de arte.   La buena charla, significa limpiar de parte y parte el arse-nal oxidado que guardamos en temas de filosofía, historia, música, antropología, sociología, pintura, escultura y gra-bado. De tal suerte que me dispuse a discernir el discurso de un afro descendiente ilustrado, de temple firme, con sentencias incólumes; convicciones ancestrales y contem-poráneas detalladas desde su parada, su cuello erguido, sus manos grandes y un alma invencible que fortifica el si-tio que el art

  Comentarios sobre la obra de Bladimir Viteri Marco Cadena   Diario La Hora, Junio 2008   El artista recoge formas tribales e iconográficas y las plasma en sus cuadros.   La obra de Viteri está fundamentada dentro de las es-tructuras humanas y anatómicas, trata de hacer una recomposición de la forma, desde su realidad como afro-ecuatoriano, es ahí donde radica la temática afro que maneja.                                                               • Germánico Solís   Diario La Verdad, Agosto 2005 Como si su musculatura estuviera hecha de brea, el artista camina de tal manera que hoy se le ve aquí, mañana en cualquier ciudad del país, y en los siguien-tes días nuevamente en su querida tierra, descubrien-do el conocimiento, discerniendo en exposiciones,  conferencias, o sencillamente, como asiduo observa-dor de los quehaceres donde su inteligencia puede captar el sentido que el urbanismo da al arte.   • Diario Página Siete   La paz Bolivia, Agosto 2011   El

  Comentarios  Juan F. Ruales Bladimir Viteri se ha exorcizado de los demonios y dioses occidentales para construir una teología cro-mática y étnica que le remite a sus raíces y a sus an-cestros de los que se sabe, no solo parte, sino juez. Por ello su pintura es bellamente pagana, ni folklórica, ni decorativa.   La obra de Bladimir Viteri es el develamiento de una cosmovisión en proceso de pesquisa y construcción por parte del artista, búsqueda cuyos resultados, aun-que están encubiertos, sin embargo recién se acaban de descubrir.   • Verónica Gudiño   Diario El Norte, Junio 2008   Bladimir Viteri es un pintor de contrastes, Por un la-do encontramos un dibujo precioso, colores limpios, nubios; y por otro la imagen de una mujer negra cui-dadosamente estudiada, que esconde siempre algo y que seduce al ojo por la aventura que suponen sus misterios plasmados en el lienzo. Haber recurrido al arte africano como medio de inspiración y experi-mentar con diferentes formas

  Bladimir Viteri Nace en 1981 Gloria Rengifo de Velasco menciona: H ablar de Bladimir Viteri es recorrer sus más de veinte años dedicados a la búsqueda de la ex-presión más firme y honda de su identidad ne-gra. Años de rompimiento de esquemas y atavismos, de   clishés y formalismos, de conceptos y estéticas pre-ela-boradas. Un camino de reafirmación de lo suyo.   Recorrer su obra desde las primeras pinturas, graba-dos y esculturas, pasar por la expresión más pura de sus “Ídolos y Animistas” y llegar en retrospectiva a observar la esencia de su piel y sus ancestros nos po-ne frente al arte de la negritud en todas sus expresio-nes, pero sobre todo ante el hombre, ante el artista que las recoge, las sublimiza y les permite emerger ní-tidas, en su más grande concepto y colorido.   Una mirada escudriñadora de sus magníficas figuras de la negritud nos muestra su estética producto de una profunda fusión del hombre con la tierra, con su cotidianidad, con el encuentro entre hom